Avalanche 2: Super Avalanche es la continuación de un título que salió en 2007, un arcade indie de plataformas de esos que te enganchan con sólo mirarlos, que Midnight City pretende hacer llegar a Steam gracias a los votos de los jugadores en Steam Greenlight y cuyo protagonista es un tanto inusual: un marshmallow, lo que aquí siempre hemos llamado una nube.
El único objetivo del protagonista es superar nivel tras nivel saltando, trepando por plataformas y acabando con sus enemigos a base de botes y rebotes. Sí, parece tonto, pero en cuanto juegas la demo que ha preparado el estudio, te quedas pilladísimo. Y es que Midnight City, el sello indie digital de Majesco, ha diseñado con Avalanche 2: Super Avalanche un juego que es todo diversión y pura adicción. Lo que se llama un «climber» en el que el protagonista siempre mira hacia arriba –y a veces hacia abajo, según donde esté la meta de cada nivel– para saltar, aplastar a sus enemigos, usar los bonus y objetos de ayuda que encuentre e ir batiendo récord tras récord.
El original era un juego en flash –para jugar en navegador–, pero esta continuación será un título descargable, aunque la demo que Midnight City ha desarrollado para que puedas echarle un ojo se juega como el primer Avalanche. Esta continuación se podría comparar con títulos como Spelunky o Binding of Isaac –de cuya segunda parte habló aquí Bruno ayer–, en los que cada partida es diferente, hay mejoras, tiendas para comprarlas, PNJ y hasta batallas con jefes finales. Podrás disfrutar de hasta 100.000 combinaciones posibles de power-ups y el estudio habla incluso de un millón de combos personalizados. Además, en Avalanche 2 existirá un modo de juego cooperativo para dos jugadores. Una auténtica locura de plataformas, en definitiva.
Aunque el juego está en Steam Greenlight para recibir votos de los jugadores, es posible hacerse ya con una reserva directamente en la página oficial, por 7,49 €, de modo que recibirás un código de Steam o Desura para su descarga, en su momento. Por ahora, ya te decimos, la demo te deja jugar 30 minutos al día, y es un puro vicio.