Deep Under The Sky es un juego indie con un toque un tanto surrealista, tanto por su espectacular explosión artística, como por su protagonista –una especie de medusa que va deslizándose por los cielos y nubes de Venus– y su jugabilidad. Pero también lo es por el sistema que se han sacado de la manga sus dos autores para venderlo a aquellos jugadores que se quieran hacer con él y no puedan gastarse el dinero necesario o no tengan esos 10 dólares que cuesta: algo a lo que han llamado Art to Play. ¿Tienes tiempo y pinturas en casa?
Es difícil decir qué tipo de juego es Deep Under The Sky: ¿es un plataformas? ¿Es un juego de acción? ¿Es un simulador de medusa espacial? Y si poder considerarlo de un género ya es complicado, su estilo artístico no es tampoco fácil de definir, pues parece algo así como el resultado de mezclar fractales con la caja de pinturas de un colegial. Algo único, vaya.
Deep Under the Sky es el resultado de la unión de dos desarrolladores indie: Colin Northway, creado de Incredipede, y Rich Edwards, responsable de Pineapple Smash Crew. El juego se puede comprar directamente a sus creadores por 10 dólares, pero ambos –con la experiencia que da lo de ser autores independientes– parece que saben que incluso un precio tan asequible como éste no lo es para todo el mundo, y hay gente a la que le gustaría conseguir su juego que andan cortos de presupuesto, así que se han inventado algo a lo que han llamado Art to Play para todos aquellos que quieran Deep Under The Sky, pero no tengan esos 10 dólares, y es dar rienda suelta a su vena artística creando un dibujo, pintura, etc. basado en el juego y enviárselo a los autores. Eso sí, que se note que se le haya dedicado algo de esfuerzo y tiempo. Media hora, por lo menos, según Colin y Rich. Pues, como medio de pago, la verdad es que mola, y si te interesa, tienes más detalles en la web del juego.
