La guerra de la realidad virtual es una realidad tan evidente como la guerra de los motores gráficos, aunque en el caso de lo primero solo hay dos contendientes reales, Oculus y Valve. Del Oculus Rift ya conocemos muchos detalles y hemos visto evolucionar su tecnología durante bastante tiempo, ¿pero qué pasa con el HTC Vive de Valve? La compañía va poco a poco soltando información nueva y ya vamos entendiendo por dónde van a ir los tiros, además de que ya han dejado claro lo que más nos preocupa, el precio. No han dado una cifra exacta, pero sí han dicho que será caro porque la experiencia es premium.
«Queremos lanzar la experiencia de realidad virtual más premium que el mundo haya visto. Esto no es marketing, sino la posición que quiere ocupar Vive en el mercado. Esto es el punto más alto de la oferta.» «Incluso si tiene un precio un poco más alto, nos parece lo apropiado desde un punto de vista estratégico. El precio siempre depende del mercado, además. Sabemos que habrá mucha demanda, por lo que la sensibilidad con el precio no es tan fuerte al principio».
No suena bonito decir algo así, pero en el fondo es lo que piensa y quiere Valve: la gente que va a pagar por la realidad virtual pagará lo que le digan, sobre todo los early adopters. ¿Pero de cuánto estamos hablando? «Queremos mantenernos entre los 200 y los 400 dólares. Que nos deslicemos en un sentido o en el otro dependerá de la cantidad de dispositivos, de las reservas, de los componentes finales, de las negociaciones con los distribuidores…»
HTC Vive se lanzará este noviembre, según Valve y HTC, una fecha bastante más clara que la de Oculus Rift, que sigue con su tercer modelo para desarrolladores y sin fecha a la vista para su versión de usuarios ni un precio final.