World of Warcraft amplía sus contenidos en el juego base para los nuevos jugadores, incluyendo todas las expansiones hasta Cataclysm. Parece que Blizzard se ha tomado en serio la pérdida de suscriptores que ha tenido en los últimos tiempos y, aunque sigue sin haber nadie que le tosa a WoW en cuanto a jugadores activos de pago, no cabe duda de que es un aliciente estupendo para sumar nuevos usuarios para el futuro… mientras llega Titan.
Ha sido hace pocos días cuando World of Warcraft ha dado el paso para ofrecer algo nuevo a los jugadores que aún no se habían animado a entrar en Azeroth, pese a que vamos para 10 años ya de dominio absoluto del MMO de pago de Blizzard. Pero pese a que nadie ha sido capaz de seguirle el ritmo hasta ahora –no digamos ya de hacerle frente– el tiempo pasa factura y el número de suscriptores activos del juego no ha parado de descender. Y aunque a muchos ya les gustaría moverse en esos números, Blizzard ha dado el paso de ofrecer más a los nuevos jugadores para potenciar las ventas.
El pack base de World of Warcraft amplía así sus contenidos hasta Cataclysm, incluyendo, claro, las expansiones precedentes, The Burning Crusade y Wrath of the Lich King. Realmente, lo que ahora se vende como World of Warcraft es lo que antes se conocía como Battlechest, y puedes encontrarlo tanto en tiendas físicas como en Battle.net, incluyendo los discos de juego, una guía oficial para principiantes y una guía de inicio rápido, en 7 idiomas (inglés, francés, castellano, alemán, portugués, brasileño y ruso). No es mala manera de empezar en Azeroth, no.
